75. SAN PABLO VILLA MITLA
PUEBLO MÁGICO DEL ESTADO DE OAXACA

San Pablo Villa de Mitla,

Pueblo Mágico ubicado
en Oaxaca, frecuentado
por miles de visitantes
de todas partes, amantes
de su mítico pasado.

Es junto con Monte Albán,
gran zona ceremonial,
arqueológica y ritual,
de los tiempos prehispanos,
antes de aquellos cristianos,
arrasaran el lugar.

“El Grupo de las Columnas”,
destaca en Mitla, admirable
construcción, es un notable
ejemplo de arquitectura,
con su prístina estructura,
de antiguos tiempos datable.

Es la iglesia de San Pablo
Villa de Mitla, tesoro,
con sus detalles en oro,
su vasto atrio y la entrada,
por noble arco ornamentada,
y su amplio espacio sonoro.

«La Ciudad de los Palacios»,
sus paredes decoradas,
con mosaicos y adornadas,
con grecas y con motivos,
de variados tonos vivos,
y bellas piedras cortadas.

Villa de Mitla es santuario,
por sus bienes naturales,
y reliquias culturales,
por sus bellas construcciones,
turísticas atracciones,
y antiquísimos rituales.

Manantiales de Agua Blanca,
Mitla y Yagul, las prehistóricas
cavernas, las mitológicas,
obras de arte zapoteco,
y del pasado mixteco,
maravillas arqueológicas.

Mictlán “tierra de los muertos”
en náhuatl, recomendable
destino, con su agradable
entorno con muchos museos,
también solitarios paseos,
y su historia venerable.

Cerca a la Plaza central,
Museo Frisell, un recinto
majestuoso, laberinto
de urnas, tarros y braseros,
ídolos, hachas, morteros,
reliquias de un mundo extinto.

Pueblo de peregrinaje,
fiestas, danzas, tradiciones,
paganas celebraciones,
con fuegos artificiales,
y comparsas populares,
con jaripeo y canciones.

En el Día de los muertos,
hay grandes celebraciones,
hay altares y oraciones,
a aquellos seres queridos,
que ya han desaparecido,
día de ofrenda y libaciones.

En cuanto a su rica flora,
es región privilegiada,
densamente arborizada,
varias especies de pino,
de latifolias y encino,
por montañas circundada.

Es famosa población,
por sus tejidos a mano,
maestría del artesano,
en telar de lanzadera,
es tradición duradera,
desde tiempos prehispanos.

Gargantillas y pulseras,
y tejidos estampados,
con motivos del pasado,
códices y personajes
zapotecas, bellos trajes,
finamente trabajados.

En cuanto a gastronomía,
no puede faltar el mole,
y si es bebidas, atole
de maíz o de panela,
chocolate con canela,
el tepache y el pozole.